MGallery es una colección de hoteles boutique dedicada a los que sienten pasión por los viajes, la literatura y la cultura. Cada hotel MGallery representa una puerta a otro mundo: a un momento del pasado, un recóndito oasis o un impresionante paisaje natural. Desde mi ventana en Le Louis de Versailles se podía ver la entrada principal al famosísimo Palacio de Louis XV que ha puesto a está ciudad en el mapa de los viajeros. Yo me trasladé a la corte de Louis XIV por unos días.
Versailles bien merece una visita y tiene al palacio como atracción principal, pero además, dispone de una gran oferta cultural, de compras y gastronómica.
Linkar aquí para ver mis fotos de Le Louis MGallery
Linkar aquí para ver mi vídeo de Le Louis MGallery
El hotel está situado tan sólo a 16 kilómetros de París, y se llega en un plis con el RER C se enlaza super fácil o el autobús RATP 171 desde Pont de Sèvres. La estación de RER está a dos minutos literales del hotel Le Louis M Gallery; o como yo hice directamente desde el aeropuerto de Orly en una media hora.
Su arquitectura y decoración es el resultado magistral de combinar la elegancia del estilo contemporáneo con el refinamiento clásico perfectamente pensado por las diseñadoras gemelas rusas Irina y Olga Sundukovy. En Le Louis mezclan una interesante perspectiva de sus raíces históricas francesas, pero de una manera moderna:
La inspiración de las hermanas Sundukovy viene de la arquitectura y los jardines de Versailles, estudiando cada detalle para decoraciones de la pared y las formas geométricas de la jardinería. Los pasillos de las habitaciones están divididos en dos colores: plata y oro, que son los reinantes en el Palacio.
Las 152 habitaciones son amplias y luminosas. En la zona de trabajo hay una lámpara de cristal francés –chandellier– que recuerda los palaciegos. la suites disponen de bañera, y todos tienen toiletries de Clarins.
En la planta superior del edificio se encuentra la zona de bienestar: un gimnasio muy bonito, hammam, sauna y ducha sensorial, todo bajo el techo abuhardillado del hotel y rodeado por una terraza accesible que tiene vistas a todo el centro de la ciudad.
Mi parte preferida del hotel es Le Bar, una barra espectacular bajo un resplandeciente techo acristalado. Sin duda el lugar preferido de los instagrammers que visitan ese bar.
Allí probé los dos cócteles marca de la casa: Louis y Marie Antoinette
El hotel organiza una clase yoga todos los sábados a las 10 de la mañana en una de las salas, y me apunté. Yoga rodeada de inspiración versallesca ¡Fantástico!
El desayuno es delicioso con una gran oferta horneada en casa: pastas, brioches, pasteles, y como no quesos, embutidos.
Los croisanes que crujían y fueron mi delicia para mi paladar y mis oídos.
Sin nutella aunque sí había un chocolate de untar similar y sin aceite de palma.
Las comidas tienen lugar en L’Alcôve un moderno restaurante con guiños a la historia versaillesca:
Comida con toques de diseño y productos locales. Y no os perdáis el brunch de los domingos, de referencia en Versailles.
Le Louis organizó para nosotros un curso de cocina de postres franceses con el renombrado chef Arnaud Willk-Fabia: Tarte au Citron, Moelleaux aux 2 chocolats, Financier au caramel au beurre salé, todo delicioso.
Yo odio cocinar pero me encanta comer dulces, por lo tanto hice de pinche de cocina y degusté nuestras creaciones:
Gracias al conserje del hotel, pude organizar una visita privada al Palacio de Versailles, sin esta visita exclusiva, tendría que haber hecho colas interminables para entrar. Y además pudimos visitar diferentes salas que normalmente no están abiertas al público.
En el mismo palacio podemos encontrar Ore, el bistró de Alain Ducasse. Muy recomendable para desayunar o almorzar.
En las noches se puede privatizar y degustar un menú degustación de estrella Michelin, como Ducasse au Château de Versailles para una experiencia gastronómica única.
con la bienvenida de un cóctel delicioso:
y una cena digna de reyes con una mise en scène fantástica:
Todo estas actividades las organizaron desde el hotel Le Louis MGallery. El conserje puede ayudar en todo lo que necesitéis.