Seleccionar página

Brenners Park Hotel & Spa fue construido en 1872, es la propiedad bandera de la colección de hoteles exclusivos Oetker. Brenners es un elegante hotel de cinco estrellas que ofrece un abanico de servicios exquisito rozando la perfección, con un entorno y un ambiente distinguido y lleno de glamour.En este link podéis ver mis fotos de Brenner’s Park y Villa Stéphanie
En este link podéis ver mis fotos de Baden-Baden
En este link podéis ver mi vídeo de mi suite en Brenner’s Park
En este link podéis ver mi vídeo de mi suite en Villa Stéphanie
Desde hace más de 125 años, Brenner’s Park ha sido el punto central de la bulliciosa vida social de Baden-Baden y es en parte responsable de poner esta pequeña ciudad en el mapa de los viajeros de lujo, siendo sus jardines que dan a una de las más bonitas avenidas del mundo la Lichtentaler Allée, destino de clientes internacionales, especialmente rusos adinerados.Brenners Park dispone de 100 habitaciones y más de 200 empleados que se desviven para poder proporcionar la mejor estancia a huéspedes, así pues el hotel representa, sin duda, los stándares más altos del lujo: Cada habitación tiene un diseño distinto, muchas amuebladas con piezas antiguas, todas con baño de mármol.Y a todo esto, ahora se le ha añadido un nuevo spa ubicado en la histórica Villa Stéphanie adyacente al hotel ya existente, que ofrece un enfoque integrado para la salud que refleja décadas del hotel de experiencia y profundos conocimientos de wellness y del sector médico. Abierta desde 2014.
La nueva extensión de ultra lujo del Brenners Park-Hotel Spa se centra en cuatro áreas distintas combinando belleza, desintoxicación y nutrición, atención médica y emocional. Cubriendo un área de 5.000m2, Villa Stéphanie se expande en cinco plantas y lo conforma una sauna 500m2, piscina, gimnasio privado, hammam. También encontramos 15 salas de tratamiento con terrazas privadas con vistas a los jardines y un salón de té encantador.Villa Stéphanie también se conecta con Haus Julius, una propiedad de 18.300m2 dedicada exclusivamente al Brenners Medical Care: controles generales, medicina estética, ginecología, estilista dental, medicina holística, fisioterapia, clínica de ojos y piel, todo en un entorno zen y de estilo cual tienda de decoración.Las 15 impresionantes suites de Villa Stéphanie incluyen personalización diseñada para el perfecto descanso de los huéspedes. elegancia y funcionalidad: Apretando un simple botón se desconecta la señal de wifi y así nos aseguramos de no ser interrumpidos por el universo exterior. Aunque tengo que confesar que prefiero estar conectada. La opción es del huésped.Una visita a Brenner’s Park no sería completa sin un tour por la ciudad de Baden-Baden. Una ciudad pintoresca e histórica: calculemos un par de horas para recorrer el centro de la ciudad y la zona comercial.Ineludibe la visita a los baños romano-irlandeses Friedrichsbad, en su edificio histórico, y a los baños de Caracalla y disfrutar de sus aguas curativas -en la ciudad brotan 12 fuentes termales naturales-. Obligado entrar en su famoso casino Kurhaus, sea para jugar, sea para visitarlo, o al teatro Friedrichsplatz con su festival musical anual Festspielhaus.Si disponemos de más tiempo, podemos visitar la Selva Negra, tierra encantadora donde las viejas tradiciones permanecen intactas. O la propuesta de recorrer el Rebland, el hogar de los viñedos de Baden-Baden, sinónimo de buenos vinos y deliciosas especialidades culinarias: un pintoresco paisaje de viñedos bendecidos por el sol, con espléndidas vistas del Valle del Rin y de la Selva Negra.
Como el propio Brenners Park Hotel, hay una grandeza mística sobre esta parte del mundo atemporal y nos hace ver que son las cosas más simples las que más alimentan la elegancia, el marco perfecto para un viaje sin prisas.