Haciendo un tour guiado por Liubliana, el nombre de Jože Plečnik aparece con muchísima frecuencia pues se le define como el padre de la arquitectura en Eslovenia y muchos de los elementos principales de la ciudad son obra de él. Era una persona muy obsesiva con su trabajo, tanto que recorrió media Europa para ampliar sus conocimientos y fue dejando su estampa en obras de diferentes ciudades. Sin duda es el arquitecto esloveno más importante y he querido indagar un poco más.
Familia, estudios y carrera
Empecemos por el principio: Jože Plečnik nació en Liubliana en 1872 y murió en 1957. Hijo de una familia católica muy estricta, su padre era carpintero, un hermano fue sacerdote, él mismo no se casó. Jože continuó su educación en Graz, estudiando diseño de interiores y carpintería artística. Después de eso, se fue a Viena, donde estudió arquitectura con uno de los arquitectos más famosos de la época, Otto Wagner. Al terminar la universidad fue becado para visitar durante 2 años Italia y Francia. Todo lo que vio allí le influyó significativamente en su trabajo posterior.
Aunque sus primeros edificios podrían clasificarse como parte del movimiento Art Nouveau, fue fuertemente influenciado por el arte y la arquitectura clásicos. Fue entonces cuando su trabajo se volvió mucho más clasicista, desarrollando así su estilo único. El enfoque de Plečnik siempre estuvo en el espacio público. Podríamos considerarlo un diseñador urbano incluso más que un arquitecto. Incorporó la naturaleza en sus diseños de tal manera que los convierte en un ejemplo del espacio público centrado en el ser humano. Después de vivir y trabajar en Viena y Praga, en 1921, cuando tenía casi cincuenta años, regresó a Liubliana, donde se convirtió en profesor de arquitectura en la recién establecida Universidad de Liubliana.
Obras de Plečnik
– Triple puente: esta obra ejemplifica la forma en que Plečnik reutiliza la arquitectura más antigua en su trabajo. A finales de la década de 1920, se hizo evidente que el viejo puente construido por Giovanni Picco en 1842 no era suficiente para la creciente ciudad. Entonces, contrataron a Jože Plečnik para construir el nuevo puente. Sin embargo, decidió usar el existente y agregar dos puentes peatonales más pequeños en sus lados. Para unificarlos, diseñó la misma balaustrada en todos esos puentes. Los dos puentes adicionales están separados del central. Plečnik los construyó en forma de embudo, enfatizando el de la Plaza Prešern.
– Biblioteca Nacional Universitaria: la construyó como un símbolo de aprendizaje y conocimiento. Inspirada en los palacios renacentistas italianos, el edificio tiene un simbolismo intrigante. Plečnik utilizó algunas de las piedras del antiguo del edificio que se encontraba en su lugar e incluso algunas de Emona que era el nombre de la ciudad romana que después se convirtió en Liubliana.
Sus ventanas simbolizan libros abiertos.
En su interior, la oscura escalera monumental conduce a la sala de lectura llena de luz, simbolizando la iluminación con el conocimiento.
A pesar de que fueron realmente antipáticos conmigo y no hablaban inglés, hice una visita por mi cuenta pagando 5€. No se puede acceder a la sala principal, la visita es minimalista, no se accede al interior que era lo que me hubiese gustado.
– Mercado Central de Liubliana: se encuentra junto al río Ljubljanica y tiene un área abierta y otra cerrada. Abarca un amplio espacio entre el Puente Triple y el Puente del Dragón. Nuevamente inspirado en la arquitectura clásica, el edificio principal ubicado en el terraplén muestra la influencia renacentista veneciana.
– Terraplenes: a lo largo del río Ljubljanica, Plečnik decidió crear terraplenes y puentes y controlar así el río, aunque su idea original era llegar a cerrarlo por completo. Reforzó las orillas del río con muros de piedra y creó pequeñas terrazas junto a ellas. También plantó sauces llorones junto al río, dando lugar a un nuevo paseo verde a través del centro de la ciudad. Para el control del nivel del agua, Plečnik también construyó una compuerta con una ornamentación inspirada en el arte egipcio, griego y etrusco.
– Calle Vegova: la diseñó entre 1929 y 1937, y quiso que fuera como una especie de paseo cultural en el centro de la ciudad. Realizó un área urbana formada por árboles y elementos arquitectónicos entre la Biblioteca Nacional Universitaria y la Plaza del Congreso. Utilizó los antiguos restos de fosos medievales como elevación para los bancos. Y a lo largo de la calle, colocó muchas columnas con bustos de músicos y lingüistas famosos.
– Plaza del Congreso: la Plaza del Congreso en Liubliana fue construida sobre el antiguo foso que corre junto a las antiguas fortificaciones romanas y medievales. Lo remodeló en un área urbana moderna y utilizó hormigón para crear un diseño geométrico. Utilizó una línea de lámparas para conectar los dos edificios más importantes de la plaza, la Iglesia de las Ursulinas y el edificio de la Filarmónica Eslovena. Con todo este trabajo, Plečnik creó un espacio abierto y habitable.
Casa Museo Plečnik
Los tres hermanos Plečnik compraron la propiedad en 1915 con la esperanza de construir una sola casa para la familia. Al final resultó que Jože acabó viviendo solo en ella. Se dedicó a reconstruirla con su característico ahorro y visión práctica de las cosas. Hizo uso de materiales baratos y variados, pilares, losas y otros elementos sobrantes de proyectos anteriores.
Añadió una torre redonda terminada con una peculiar extensión circular y un techo cónico al primer piso de la casa, una terraza cerca de la entrada y un jardín de invierno.
La terraza de entrada funcionaba como sala de recepción y como lapidario. Después de la muerte de Plečnik en 1957, su sobrino Karel Matkovic heredó la casa y la donó a la ciudad de Liubliana. En 1972 se convirtió en museo. La entrada cuesta 8€.
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