Cuando de un hotel de gusta todo, desde su arquitectura, su desayuno, la vajilla del restaurante, la sonrisa de sus empleados, o incluso su presión de la ducha es mejor compartirlo. Me pasa con pocos hoteles en el mundo, porque al tener la suerte de ir a tantos y tan buenos hoteles, de todos destaco alguna cosa, y muchos de ellos son casi perfectos. Casi perfectos para mi gusto, para mis necesidades viajeras, para hacerme sentir como en un lugar único y con gente encantadora. Yo en un hotel no busco sentirme como en casa, busco sentirme viviendo una historia importante y siendo protagonista de un marco perfecto para mi.
En Julio 2014 tuve la suerte de quedarme en el Mandarin Oriental Taipei que lo acababan de abrir. Fueron dos noches. Recién he regresado allí unos días, y esta vez han sido 3 noches. Todo perfecto. Desde su elegante bienvenida, a su acogedora y amplia habitación, a su exclusivo spa y a su inolvidable gastronomía. El lujo agradable y sin estridencias
Para ver mis fotos de Mandarin Oriental Taipei linkar aquí
Para ver el vídeo de mi Suite City en Mandarin Oriental Taipei linkar aquí
Para ver el vídeo de mi Suite Boulevard en Mandarin Oriental Taipei linkar aquí
He aquí mis 12 motivos por los que Mandarin Oriental Taipei es un hotel perfecto:
1- Por su discreto servicio y la atención completa de los empleados, desde el de la recepción, al camarero, a la gobernanta. Hacen con su sonrisa y esfuerzo, que la estancia sea no sólo lo más agradable posible sino que roce la perfección.
2- Por su ubicación perfecta en el corazón de la ciudad. Desde allí hay acceso a centros comerciales, a muchas conexiones de potenciales negocios, tenemos una parada de metro a tan sólo cinco minutos caminando, el Taipei Arena y el Taipei World Centre también están a un tiro de piedra.
3- Los m2 de sus habitaciones: la “standard” aquí llamada Deluxe Room, mide 55m2. Esto en cualquier hotel europeo, podría ser una suite.
4- La decoración de las habitaciones: chic y confortable, con toques art déco
5- Su opulente entrada que es sencillamente espectacular. La primera impresión del hotel, deja sin palabras a sus huéspedes. Techos altísimos, todo de mármoles blancos y una lámpara que protagoniza el espacio
6- Sus dulces, sí, la oferta de dulces y bollos en el desayuno es espectacular y en el The Oriental Lounge está lleno de tentaciones en forma de pastitas o de chocolates, que hacen la delicia a golosos como yo.
7- Sus paneles de piel esculpida en el cabezal de la cama. Son elegante y únicos. Una pieza distintiva hecha a mano por la artista inglesa Helen Alex Murray.
Las peonias son el diseño principal de los relieves, y representan la buena suerte para la cultura china.
8- El Spa es de los más grandes del grupo con sus 2500m2 divididos en dos plantas. De diseño chic y elegante hecho por los canadienses Yabu & Pushelberg, es mi lugar favorito. Incluye dos zonas húmedas con saunas, hammams y jacuzzis, separados para hombres y mujeres.
Me recomendaron probar el tratamiento “Un viaje de Formosa” para una experiencia única en el país insular asiático: utilizan sal de la histórica ciudad de Tainán y mezclado con polvo de perlas, es el peeling del cuerpo, seguido con arcilla blanca para la suntuosa envoltura, y terminando con un masaje con los aceites esenciales naturales de increíble aroma. Se corona con una deliciosa taza de té local. Espectacular!
9- Por Loris Pistillo, su chef italiano de la región de Puglia quien dirige el restaurante italiano Bencotto, quien con sus recetas heredadas de su abuela y de su madre Angela, demuestra un saber hacer realmente italiano y porque sus raviolis de berenjenas ahumadas han sido uno de los platos más deliciosos que he comido en años.
Todo super delicioso.
10- Las 1700 obras de arte que se encuentran repartidas por todo el hotel, en cualquier rincón se encuentran obras de artistas renombrados como Je-Hyo Lee y Wei Zhu.
O antigüedades o las lámparas más increíbles con diferentes diseños
11- Su restaurante chino Ya Ge dirigido por el chef local Tse Man, donde he degustado platos deliciosos, especialmente uno que quedó en mi memoria en 2014 y que pude repetir recientemente: el cangrejo con cebolla al horno.
Presentación impecable, y delicioso.
12- Su piscina discreta donde podemos disfrutar de un baño en el corazón de la bulliciosa Taipei.
13- The Mandarin Cake Shop donde encontrar la pastelería más refinada de la ciudad.
Y con su propia terraza para tomar algo.