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Visité The Peninsula Manila en mi primera estancia en la capital filipina en julio 2013, entrar en este hotel de lujo, símbolo de la elegancia y del servicio perfecto, es hacerse sabedor de lo que significa el lujo auténtico, con historia, con pasión y con experiencia. En mi último viaje he podido alojarme en el emblemático hotel por tres noches y además disfrutar de todos sus servicios y restaurantes. 
​En este link podéis ver mis fotos de The Peninsula Manila
En este link podéis ver mis fotos de Manila

Además, esta vez pude experimentar su conocido programa The Peninsula Academy, actividades diseñadas exclusivamente para los huéspedes de los hoteles Peninsula, para poder conocer mejor la cultura local y puedan tener una experiencia más allá del viaje, llegar a rincones a los que normalmente no llegamos en una visita superficial, y conocer los detalles behind-the-scenes. Son actividades pensadas para todas las edades y para disfrutar de nuestro destino Peninsula escogido. En el caso de The Peninsula Manila las actividades diseñadas van desde cocinar el famoso postres helado filipino halo-halo,  a visitar uno de los más eminentes joyeros filipinos en su estudio, a visitar el patrimonio colonial, etc.  Y siempre con un transporte privado Mercedes Benz.

Mi interés radicaba en conocer algún mercado de productos frescos locales, y conocer un poco la escena de diseñadores filipinos. Mi primera visita fue  el Cubao Farmers Market gestionado por el Grupo Araneta

donde se puede comprar toda clase de productos frescos y además descubrí frutas exóticas que no había visto nunca, probé productos dulces-dulcísimos a los cuales los filipinos son adictos, y ví como preparaban el pescado de diferentes maneras.

En este mercado también se puede comer.

Despues disfruté de unos platos filipinos en el conocido Café Juanita, propiedad de un famoso cirujano apasionado por la cocina y que tiene el restaurante decorado cual tienda de antigüedades con un toque rococó. Sentarse en él es empezar a disfrutar por la vista y deleitarse con platos típicos filipinos: como el adobo de cerdo, la pasta de cabello de ángel con cangrejo, etc

Mi recorrido por los diseñadores locales empezó con la tienda y showroom de Kenneth Cobonpue, diseñador muebles, donde todas sus piezas están hechas pensando en la comodidad y en la innovación. Su inspiración es la naturaleza, él es natural de la isla filipina de Cebú. Utiliza materiales como el mimbre, el bambú, aluminio, politilieno, y podemos encontrar sus muebles en algunos decorados de Hollywood o tiendas de todo el mundo.
Coponbue inició su carrera de diseñador industrial en el Instituto Pratt de Nueva York, y trabajó como aprendiz en un taller de cuero y madera cerca de Florencia, aunque él sabía que su futuro estaba en Filipinas. Se dedicó a combinar materiales orgánicos de la región con innovadoras técnicas de producción hechas a mano. Sillas reclinables, muebles para la sala, camas y pufs en forma de sandalias, le han valido varios reconocimientos, entre ellos el premio al Mejor Diseño de Asia, en 2005, y el premio especial para el Empresario más Dinámico, de 2007.

– La tienda Ritual es la iniciativa de dos jóvenes emprendedores y en ella encontramos un pequeñísimo café con comida bio, la venta de chocolate o cervezas artesanales, así como productos de cuidado personal orgánico todo producido en Filipinas. Una delicia.

– En una zona ajardinada y vallada de Pasay encontramos una zona vallada, lo llaman Chinese Compound compuesta por unas 15-20 casas de los años 50 de una gran familia de procedencia china, y ahora se ha convertido  en una zona reservada con jardín común, donde encontramos el nuevo hotel The Henry Manila, galerías de arte y showrooms de diseñadores. Es un lugar sencillamente encantador y si amáis el arte y la belleza es una visita obligada.

En el compound encontramos:
– Jojie Lloren es uno de los diseñadores líderes de Filipinas y uno de los preferidos de la alta sociedad y más respetados po la industria de la moda filipina. Es mentor de Project Runway Philippines y le encanta impartir su habilidad técnica e inspirar a los nuevos diseñadores. De ejecución impecable, su moda consiste en inventar piezas a medida que resuenan con glamour y sofisticación atemporal. Él mismo me iba enseñando modelos muy sofisticados y de me comentaba sus inspiraciones.

– La Galería de arte Albert Avellana fue inaugurada en 1997, se especializa en arte Filipino llamativo. Este antiguo espacio fue reconvertido por el mismo Albert en una galería de retro-moderno para el arte funcional. Los dos pisos están llenos de arte, con la planta superior se utiliza para promover exposiciones, un lugar perfecto para artistas nuevos que el mismo Albert Avellana se encarga de descubrir y promocionar. Él mismo me comentó diversas obras de arte y su significado.

– La galería y showroom de muebles Artelano 11 del diseñador Eric Paras, abrió en  enero de 2013, y en ella se encuentran sus diseños y también muebles o decoración que él mismo compra en otras partes del mundo, incluyendo antigüedades. Pasear por las dos casas que conforman su showroom es un placer y vienen ganas de comprar un poco de todo.

Eric en persona fue mi cicerone en su galería y me explicó que además está diseñando hoteles, como el que está en el mismo compound The Henry Hotel Manila, o Pearl Farm Resort en Mindanao.

The Peninsula Academy fue creada para dar a los huéspedes una introducción muy personal del lugar y costumbres, y ayuda a transmitir los aspectos claves de la cultura local, estilo de vida, cocina, artes e historia a través de actividades, tours y clases individualizadas.
Quedé realmente impresionada con los diseñadores que conocí y por el talento existente en Filipinas. Mi mejor descubrimiento!
Y a para volar a Filipinas desde Barcelona, la mejor conexión sin duda es con Singapore Airlines: camino más directo y con más conexiones internas en el país.