Pasta, pizza y helados son los productos más deseados para el viajero cuando se viaja a Italia. Tópicos y esperados. Los tres deliciosos elementos, tienen en Italia una fama más que merecida y real: son mucho mejores que los que estamos acostumbrados a tomar y sin duda ayudan a promocionar la marca Italia por todo el mundo. Yo misma prácticamente sólo como helados cuando estoy en Italia. Y además forman parte de mi ritual del viaje: comerme mínimo un helado al día y disfrutar de la gastronomía. Aunque sea invierno (sí los helados también son para el invierno, como algunas terrazas). Curiosamente la relación tamaño-precio es mucho mejor en Italia que en cualquier ciudad del mundo: el helado más pequeño es de un tamaño considerable, no los ponen a bolas como los conocemos tradicionalmente en España, sino «paletazos». El precio en Florencia es de 2,5€ el cucurucho más pequeño. Luego añadir los toppings/aderezos adicionales. Incluso helados dentro de brioches, una auténtica bomba calórica pero deliciosa.. Los helados son muy cremosos y absolutamente deliciosos. Y para mi que soy una super fan del helado de chocolate negro, «cioccolato fondente«, en algunas de las heladerías que os he probado tienen más de 2 sabores diferentes de chocolate negro, incluso hasta 6. Los que triunfan en Italia son los helados de tiramisù, Nutella, pistacho, fiore di latte (nata) y sabores variados de fruta.
En este link podéis leer mis sugerencias de hoteles para todos los presupuestos en Florencia
Me he recorrido una a una heladerías y pastelerías de renombre florentinas para poder hacer la mejor selección para mis lectores y estoy muy agradecida a los conserjes del Hotel Four Seasons por sus sugerencias:
– Caffè Libertà: Es sin duda el la clásica cafetería italiana donde todo es delicioso, desde los cafés, a los bocadillos, a los helados.
La parte de la pastelería os encantará, y si sois más de salado id a la hora del aperitivo.
– Stefania Pasticceria: De sobras es conocido -o tendría que serlo- que los mejores dulces italianos se elaboran en Sicilia, y en Florencia encontramos la Pasticceria Stefania con delicias para perdernos (incluyendo las clásicas de la Toscana).
– Badiani: Otro clásico también alejado del centro, ofrece de todo y todo buenísimo. Como curiosidad ganaron en 1979 un concurso sobre el helado del arquitecto Buontalenti (florentino del siglo XVII) y ganaron con una especialidad de helado de nata y crema.
– Gelateria della Passera: Esta minúscula heladería en una esquina encantadora del centro histórico de Florencia fue abierta en 2009, producen los helados en el pequeño laboratorio adjunto a la tienda, sólo productos naturales y de primera calidad.
Destaca por encima de todos el de crema a los siete perfumes, con una inspiración claramente oriental de canela y otras especias. Y el sorbete de té verde y té negro. A parte, claro, de los clásicos sabores.
Son los mismos propietarios del Caffè degli artigiani justo enfrente.
– Gilli Caffè Pasticceria: Abierta en 1733 como «La bottega dei pani dolci», es un clásico en el centro histórico de Florencia. Cafetería, pastelería, salón de té, lugar para un aperitivo perfecto, tutta Florencia se encuentra aquí.
Tiene una parte de enoteca donde vende vinos seleccionados toscanos y de todo el mundo.
Entrar y visitarla es ya un placer: decoración de estilo Liberty, paredes de color marfil, lámparas de Murano, techos pintados, arcos, todo muy señorial como en el inicio del 1900. Por favor, fijaos en el famoso reloj a su entrada.